/ diciembre 1, 2021/ Consejos

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Helloooooooo, hoy es 1 de diciembre de 2021 y corresponde a la última entrada de este año. Adoro este mes, porque es una época de reinicio en donde hasta las personas que no les gusta planificar comúnmente, lo hacen de alguna u otra manera.

Es que el recibir al mes de enero es genial! Da una sensación de página en blanco en donde lo puedes todo! Y esa sensación es super motivadora. Por eso el gimnasio y los parques se abarrotan, por eso los cursos de lo que sea se llenan, por eso las personas estrenan cuadernos nuevos, por eso tantas cosas. Y si a todo este espíritu le sumas fiestas en donde se come, se bebe y se regala… uffff, felicidad en el aire, eso es diciembre!

Es por esta razón que mi entrada de 1 de diciembre debe ser por fuerza para hablar de la planificación del próximo año. Es una entrada en donde les contaré, de la manera más práctica que pueda, como planificar sus objetivos. La entrada del año pasado “Planifica tu 2021” sigue siendo válida, pues la manera de planificar mis objetivos no ha cambiado mucho. Sin embargo, como todo en esta vida, he evolucionado en algunas cosas, dando importancia a cosas que antes, en el enfoque estructurado que generalmente me caracterizaba, había pasado por alto, pero que hoy; después de todo un año de leer y experimentar conscientemente muchos retos, acepto que son muy importantes.

Ahora, qué quiero decir con esta introducción larga? Que mi método de planificación anual ha evolucionado y te lo explicaré en esta entrada.

Dicho método se compone actualmente de 3 grandes etapas. Y digo etapas porque llevan su tiempo y su proceso de introspección. Te las explicaré todas en esta entrada pero te sugiero que dedique por lo menos 1 semana para cada una.

 

Etapa 1 – Evaluación

Antes de tan siquiera pensar en lo que harás en el año 2022, debes evaluar lo que hiciste en el 2021. Debes saber en donde estás ahorita. Debes interiorizar lo que hiciste bien durante el año, lo cual definitivamente repetirás; y también lo que no hiciste tan bien, pues también es importante contarte verdad para no tropezarte con las mismas piedras.

Una manera muy sencilla y que muchos conocen es la rueda de la vida, este es un test un poco subjetivo en donde tu le das una puntuación a cada una de las categorías de tu vida. La verdad no enfatizaré en como hacer el test, porque en internet hay montones de ejemplos y entradas que hablan al respecto. Sólo tienes que poner en Google, la rueda de la vida y te salen montones de plantillas que puedes utilizar. Lo que si puedo recomendarte son las categorías que utilices en tu evaluación. Yo siempre me he manejado con 3 grandes categorías (profesional/académica, personal y social). Pero durante el año he visto la necesidad de redistribuirlas y aumentar a 5 categorías que son:

  1. Profesional/académica
  2. Personal
  3. Social
  4. Salud
  5. Finanzas

Las categorías que tu utilices para tu evaluación, dependerán mucho de ti; hay personas que en vez de hacer categorías nuevas, hacen como subcategorías y eso también es válido. Por ejemplo, podrías subdividir la categoría de social en: amor, amistades y familia; eso es válido, el tema es que debes estar consciente que cuando pasemos a la etapa de planificación, entre más categorías tengas, más objetivos también. Por lo que si son demasiadas, y no estas acostumbrado a planificar, te brumaras; y en marzo puede que ya tu planificación este manga por hombro y tú no la estés siguiendo. Entonces mucho cuidado que el papel lo aguanta todo, pero tu no.

Aja, y entonces qué hacemos ahora que tenemos nuestra evaluación en forma de rueda de la vida?. Pues vamos a hacer una matriz estratégica!

En el mundo de la administración de proyectos utilizamos algo llamado Matriz de Riesgos. En ella se listan las cosas que pueden o no suceder en un proyecto; dándoles un puntaje bastante subjetivo de probabilidades e impacto. Nosotros no nos vamos a ir a ese nivel tan técnico, lo que me gustaría rescatar de esta matriz es que en ella se plasma una estrategia de qué hacer si eso, bueno o malo, sucede. Es por esto, que te propongo hacer algo parecido en nuestro caso personal, en donde para cada una de las categorías que puntuaste en la rueda de la vida, puedas rescatar una estrategia para potenciar lo bueno que te ha pasado hasta ahora y mitigar lo malo. Pues no olvidemos que el proyecto más importante que actualmente tienes en tus manos es tu propia vida.

Les pondré un pequeño ejemplo para que se entienda lo que propongo:

Quiero que noten que todas las estrategias son un hábito o tienen una medida de referencia. Cuando llenes esta matriz piensa en tu vida, piensa en la estrategia y que sea un hábito o algo medible. Después que los tengas listados, ya tendrás más claridad para planificar.

 

Etapa 2 – Celebración

Como mencioné anteriormente, no todo en este mundo puede ser estructurado. Es decir, antes de planificar debes recargar baterías y premiarte por lo bueno que has hecho. Pues por muy malo que haya sido tu año, debes tener algo bueno que celebrar. No seas dura contigo misma, por experiencia te digo que el peor crítico que tendrás en la vida eres tú misma. Y ni hablar de todas las preocupaciones que cargamos en la cabeza, cosas que muchas veces ni han pasado y no pasarán, no le hagas caso a esas preocupaciones y celebra! No veas la etapa anterior de evaluación como la excusa perfecta para castigarte, todo lo contrario; resalta todas esas cosas positivas que listaste. Por eso la matriz no solo se enfoca en lo que puedes mejorar, si no también en cada una de esas cosas que hiciste bien por cada categoría.

Entonces, que te propongo yo? Pues una celebración por categoría! Como yo tengo 5 categorías, tendré 5 celebraciones conmigo misma en diciembre. ¿A poco ese plan no suena genial?

Como ejemplo, mencionaré algunas que se me ocurren, no son necesariamente las que haré, pues a la fecha aún no me decido, pero más o menos asi será la cuestión:

  1. Superé mi meta de lectura anual? Pues un día celebraré yendo a un Starbucks a leer yo sola mientras me tomo un frappuccino de dulce de leche. (si mi nutricionista esta leyendo esto, estoy consciente que eso es más azúcar que otra cosa, por eso no lo tomo casi nunca, aunque lo amo! Pero no te preocupes, solo es una celebración y regresaré a mi alimentación de siempre… Jajajajaja) el punto es que para mi eso es la mejor manera de celebrar, algo que disfruto hacer yo sola.
  2. Si tenías como meta bajar a X talla… pues perfecto! Celebre comprándose esa blusa o ese pantalón que llevas tiempo queriendo.
  3. Si terminaste el curso X, celébralo con una copa de vino! O con lo que sea que te guste.
  4. Si lograste incluir un hábito saludable en tu día a día, celébralo teniendo un picnic saludable en un parque!
  5. Si pudiste ahorrar… pues celébralo yendo a ese paseo que tienes rato de estar viendo.

En fin, estoy ejemplos son muy míos de como me gusta celebrar. Generalmente es comiendo o comprando cosas jajajajaja… pero no tiene que ser así. Hay maneras de celebrar sin gastar dinero, todo dependerá de que tan creativo seas y de que te gusté más. Yo adoro ver atardeceres, sentarme frente al mar o escuchar el agua golpear las rocas en un río; todas esas cosas las tenemos de a gratis gracias a Dios. Solo necesitas dedicarte tiempo para eso y ser consciente que es tu celebración. Lo mismo digo de la compañía, no tienes porque celebrar con alguien más, normalicemos el ir a cenar solas o disfrutar de tu tiempo sin más nadie. Son tus logros los que estás celebrando, es tu esfuerzo! si X persona no te puede acompañar, pues no pasa nada… celebra tú!

 

Etapa 3 – Planificación

Por último después de tener tus celebraciones, viene la hora de los poderes! Pues sí, vamos a planificar lo que viene. Aquí el procedimiento es bien parecido al de mi entrada de “Planifica tú 2021”. Puedes escucharlo nuevamente si necesitas los ejemplos que di, aquí no daré ejemplos, solo explicaré cada uno de los 4 pasos con unas cuantas actualizaciones.

Paso 1 – Establece un objetivo general por categoría

Aquí puedes guiarte por lo que te dio en tu matriz de evaluación y es importante acatar que el objetivo general es la meta última, es en lo que te quieres convertir en esa categoría. En el ejemplo de matriz yo mencioné, en la categoría salud, las cosas que puedo mejorar en cuanto a alimentación y en ejercicio. Mi objetivo general para el próximo año sigue siendo ser una persona más saludable. Ambas cosas, la alimentación y los entrenamientos, que quiero mejorar van ligadas al mismo objetivo general. Es por esto, que al tratar de convertir tu objetivo general en uno SMART, hay posibilidad de que lo tengas que subdividir.

Paso 2 – Convierte ese objetivo general en un objetivo SMART (específico, medible, alcanzable, realista, en una medida de tiempo)

Yo no recomiendo establecer más de 1 objetivo general por categoría, precisamente porque al llegar a este paso 2, en donde tengas que convertirlo en SMART, cabe la posibilidad de que tengas que subdividir en varios y te puede complicar la planificación.

Para convertir cada uno de tus objetivos generales en SMART, te recomiendo ver mi entrada en donde hablo sobre eso. 

Ep. 10 – Cómo Convertir un Objetivo General en un Objetivo SMART

 

Paso 3 – Divide los objetivos SMART en pasos más pequeños

Aquí la mejor actualización que puedo hacer es que intentes llevar cada uno de tus objetivos SMART a otro nivel, obligando a que te arroje un hábito.

Una técnica infalible que puedes utilizar en este paso es lo que Gary Keller menciona en su libro “Sólo Una Cosa” como “El Hábito del Éxito” para los que tienen el libro, esto está en la página 163, el la describe como la segunda verdad, y para los que no tienen el libro, yo mencioné la técnica, con todo y ejemplo, en mi episodio No. 20 “Mentiras y Verdades sobre Priorizar” y luego de tener ese hábito por cada uno de esos objetivos, entonces inclúyelos en tu vida utilizando cualquiera de las 22 técnicas sobre hábitos que te listo en los episodios 18 y 19 de mi podcast.

Ep. 19 – 22 Técnicas sobre Hábitos

 

Paso 4 – Dale seguimiento a tu plan

A lo que no le das seguimiento, no lo cumples. Darles seguimiento a hábitos es súper fácil, solo debes levar trackers, ya sea en físico o en aplicaciones. Sin embargo, en la entrada del año pasado doy un ejemplo atípico que puede guiarte si por mucho que lo intentes, no puedes sacar un hábito de tu objetivo SMART. 

Otra actualización que es valida mencionar, es que ya no uso Trello para dar seguimiento a mis objetivos y proyectos. Me he enamorado más de Asana. No obstante, lo uso más para mi trabajo que para mi vida, pues siempre, pero siempre, intento que mis objetivos SMART arrojen hábitos que son mucho más fáciles para dar seguimiento. Lo haces, ganchito; no lo haces, cruz. Y así… y esos hábitos los trackeo diariamente en mi agenda. En Asana llevo pocas cosas personales. Recuerda que entre más sencilla y rápida sea tu sistema de organización, y en este caso de seguimiento, más posibilidades hay de que lo mantengas. Toma eso en cuenta cuando escojas tus categorías y armes tu planificación.

Ep. 14 – Planifica tu 2021

 

Y bueno, he llegado al final de esta entrada y también del año 2021. Quisiera aprovechar para agradecerles a todos sus aportes, consultas, comentarios y buenas palabras; ya saben que entre mi trabajo y mis propias metas no me da tanto chance de ser tan activa en redes o incluso aquí, pero siempre que pueda estaré allí para ayudarlos. Espero que el 2022 sea muchísimo mejor que el 2021, nos escuchamos el 1 de enero.

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