/ agosto 1, 2021/ Consejos, Recomendaciones

Puedes escuchar entra entrada en podcast haciendo clic aquí

Como mencioné en mi entrada anterior (el episodio 20), en esta seguiremos hablando sobre mis aprendizajes del Libro de “Sólo Una Cosa” de Gary Keller. Esta vez enfatizando en esos aprendizajes más prácticos.

Si aún no has leído o escuchado el capítulo 20, en donde hablé sobre las mentiras y verdades de Priorizar, te recomiendo que lo escuches antes de continuar. Te dejo el enlace:

https://www.querubepanama.com/mentiras-y-verdades-sobre-priorizar/

Aquí desglosaré, con ejemplos, los últimos capítulos del libro que según el autor abrirán la puerta a tus posibilidades.

 

1 – Vive con un Propósito

Lo primero que menciona en esta sección del libro es sobre la importancia de Vivir con un Propósito, esta es la parte menos práctica de esta sección, y yo diría que la más importante. Aunque quisiera darles una fórmula práctica, tipo receta de cocina, para identificar tu propósito, no es tan sencillo. Identificar con claridad cuál es tu propósito es un trabajo arduo de introspección, que para algunos puede ser sencillo; pero para otros no tanto. Por ejemplo; yo logré identificarlo después de un par de horas de pensar, escribir y preguntarme ciertas preguntas clave que te compartiré. Son preguntas que se me fueron viniendo a la mente a medida que iba leyendo este capítulo del libro.

Es importante que sepas que estas preguntas no están en el libro, son de mis apuntes de lectura, siempre he tenido la manía de transformar ideas generales en puntos más concretos en mis apuntes. Pero, como he mencionado antes, no todos interpretamos lo mismo de las lecturas, puede que leyendo este capítulo tu destaques detalles que yo paso por alto, por eso recomiendo que si estas teniendo dificultad para entender tu propósito, puedes leer el libro por tu cuenta o buscar más información al respecto.

Y bueno, vamos con las preguntas. Yo me encerré en silencio en la oficina que tengo en casa, agarré una hoja de papel en blanco y respondí a lo siguiente:

  • ¿Cómo te gustaría que te recuerden cuando ya no estés?
  • ¿Qué legado te gustaría dejar?
  • ¿Qué cosa amas hacer y podrías hacer gratuitamente?
  • ¿En qué momentos te has sentido verdaderamente feliz, que al recordarlo es inevitable sonreír?
  • Si heredara dinero suficiente para pagar cuentas y gastos el resto de mi vida, ¿Qué hiciera con mi tiempo?

Luego de responder esas preguntas por escrito, armas un párrafo con tu propósito. Te mencionaré parte del propósito que el autor compartió en el libro y, desde la vulnerabilidad característica de mis entradas al darles ejemplos propios, también te mencionaré parte del mío, por si ambos te sirven de guía.

Propósito del Autor: Ayudar a la gente a que viva su vida al máximo a través de mis enseñanzas, mis consejos y mis escritos.

Mi Propósito: Quiero que haya más personas de bien en este mundo. Personas que ejercen una profesión eficientemente y con destacada calidad, personas que tienen valores y que siempre tienen hambre de educarse para ser mejor cada día. Por eso mi blog, por eso mi podcast, por eso los componentes educativos de mi trabajo son los que más me apasionan, y por eso quiero en el futuro tener hijos y criarlos con esas bases.

Ahora te preguntarás, pero qué tiene que ver mi propósito con saber priorizar? Y la verdad es que si tiene mucho que ver. Como lo veremos más adelante, tener claridad en tu propósito es lo que ayudará a tomar las mejores decisiones sobre a qué le dedicas tiempo día tras día. Sin esa claridad; uno hace malas inversiones de tiempo.

No te frustres si no es tan fácil encontrar tu propósito a la primera, incluso por lo que se; puede cambiar en el futuro. Tu propósito evoluciona contigo. Dedícate algo de tiempo para analizar tu caso y luego avanza con las siguientes recomendaciones.

 

2 – Vive con una prioridad

Ya teniendo claro cuál es tu propósito, eso que harías gratis si es posible, entonces puedes pasar a este segundo ejercicio que te ayuda mucho a identificar qué es lo más importante en tu vida. El libro lo llama “Marcarse Metas para el Ahora” es simplemente plasmarte metas para 6 momentos de tu vida, haciéndote 6 preguntas esenciales de la siguiente manera:

  • ¿Qué es lo único que quiero hacer en cinco años?
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer este año?
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer este mes?
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer esta semana?
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer hoy?
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer ahora mismo?

Obviamente tú te planteas estas respuestas pensando en tu propósito y en los objetivos que ya te has planteado por categoría. Los cuales deben estar alineados entre sí. Te comentaré esas preguntas con mis respuestas, enfocadas a mi propósito y a mi categoría personal, para que te sirvan de guía:

  • ¿Qué es lo único que quiero hacer en cinco años? Ser mamá.
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer este año? Tener salud de manera integral, preparándome para afrontar un futuro embarazo.
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer este mes? Consolidar una rutina de ejercicios de 45 minutos diarios.
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer esta semana? Cumplir con 5 entrenamientos de 35 minutos.
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer hoy? Cumplir con 1 entrenamiento de 35 minutos y buscar nuevas recetas de jugos verdes.
  • ¿Qué es lo único que quiero hacer ahora mismo? Preparar lista de supermercado con las nuevas recetas de jugos verdes.

Este ejercicio es dinámico, como es obvio deben repasarlas con la frecuencia requerida de cada pregunta, y aunque muchas veces ya sepas las respuestas, si recomiendo que las saques de tu cabeza, las escribas y las pongas en un lugar visible. Te ayuda a darte cuenta cuando no estas invirtiendo tu tiempo en algo que tenga que ver con tus metas. Puedes hacer el ejercicio para cada una de tus categorías (recuerdas las categorías que mencioné en el episodio pasado, el episodio número 20, en la segunda verdad? Bueno, puedes hacer este ejercicio para cada una de ellas).

 

3 – Vive de manera productiva

El orden de las recomendaciones tiene su razón de ser. No se puede hablar de productividad si no tienes claras tus metas, lo más probable es que abandonarás tus planes si esas metas no están alineadas a tu propósito. Por eso el autor lleva este orden y tiene todo el sentido del mundo. Muchas personas se saltan los primeros dos ejercicios, quieren ser productivos y punto; y así no funciona la productividad. Antes de querer ser productivo necesitas tener claridad de para qué quieres ser productivo.

Cuando ya tienes tu propósito y tus metas, para diferentes tiempos, entonces debes escoger un sistema de gestión de tiempo. Y aquí hago la salvedad de que sistema y formato no son lo mismo. Tú puedes usar el mismo sistema de gestión en un tablero, en una agenda o en tu celular. El sistema es la estrategia que usas para planificar y gestionar tu tiempo.

En esta parte salte de felicidad cuando vi que el autor mencionó el sistema que él utiliza: “Bloques de Tiempo Programados”. Pues, yo uso ese mismo sistema! Y me va genial la verdad. Es un sistema que te permite planificar tu tiempo en base a objetivos y metas; pero que a la vez te da flexibilidad. La verdad no necesariamente tiene que ser tu sistema de gestión. Te dejaré el enlace de mi entrada de “3 Consejos para llevar una Agenda de Objetivos” por si quisieras echarle un ojo y te interesa implementar mi estrategia de los 3 grandes bloques de tiempo al día. Pero si no te convence puedes investigar y tomar el sistema que mejor te convenga.

https://www.querubepanama.com/3-consejos-para-llevar-una-agenda-de-objetivos/

 

Les mencionaré un cambio de formato que he hecho en mi gestión de tiempo para que tengas aún más claro la diferencia entre formato y sistema de gestión de tiempo. Como ya mencioné anteriormente mi sistema es el de bloques de tiempo. Cuando inicié con él, dibujaba los bloques de tiempo en mi agenda (tal y como lo menciono en la entrada de “3 Consejos para llevar una Agenda de Objetivos”) Sin embargo, desde que empecé a trabajar en casa me resultó más práctico, y más amigable con el ambiente, usar un tablero que tengo en mi oficina. Allí dibujo los recuadros de los bloques de tiempo de 1 semana en una parte del tablero y me sigo organizando con el mismo sistema pero en otro formato. También conozco gente que usa el mismo sistema de bloques de tiempo pero en Google Calendar y les va genial. En conclusión, el sistema es cómo gestionas tu tiempo, el formato es a través de qué lo haces.

La cuestión es que el autor recomienda planificar tu tiempo en bloques siguiendo los siguientes 3 pasos, que son los que constituyen este ejercicio:

  • Programa primero el tiempo libre. La verdad este enfoque me voló la cabeza, pues como muchos, soy de llenar la agenda con los compromisos laborales, luego los sociales y por ultimo los personales (que son mis bloques de tiempo libre). Pero desde que leí este libro, adopté esta práctica y me dije a mi misma; no más de adelantar trabajo los fines de semana! Ese tiempo es para mí y mi familia. Pues muchas veces rellenando los bloques de tiempo de lunes a viernes me quedaban objetivos laborales sin asignar y terminaba incluyéndolos en sábado y domingo. Y con este enfoque ya no lo hago, lo primero que bloqueo es mi tiempo libre. Eso me obligó a ser más productiva de lunes a viernes, generalmente usando la técnica de Pomodoro para enfocarme sacar trabajo.

Te dejo un enlace de la entrada en donde hablé de esta técnica de productividad.

https://www.querubepanama.com/tecnica-de-pomodoro/

  • Programa las metas para el ahora. Lo que el libro llama -lo único- y que son las actividades de cada categoría que arrojó las preguntas del ejercicio de Metas para el ahora, en donde te preguntaste lo único que harías en 5 tiempos distintos.
  • Programa tiempo para planificar. Esto es importantísimo, mete en tu agenda tiempo para actualizar el ejercicio No. 2 de las “Metas para el ahora” y para redistribuir tus bloques de tiempo. En lo personal, yo hago este ejercicio 2 veces por semana, los jueves a fin del día y los lunes a primera hora. El ejercicio de los jueves es más como para evaluar qué cosas en la semana van bien o si algo que afecta el fin de semana cambió; y el lunes a primera hora es para arrancar la semana con todo. El libro recomienda que sea por lo menos 1 hora a la semana pero considero que eso es indistinto, yo le dedico más o menos 15 minutos cada vez. El tiempo que le dediques y el día no está escrito en piedra, yo he cambiado mucho eso y no pasa nada. Lo importante es que lo hagas.

Ahora, una vez que has planificado tu tiempo en base al sistema que escogiste; te toca protegerlo! El autor da 4 consejos puntuales para proteger tu tiempo que me gustaría mencionar. Me encantó que las mencionó con términos utilizados en lenguaje de guerra, como quien dice; tu misión de proteger tu tiempo es de vida o muerte, jejeje. Aquí te las listo:

  • Construye un Bunker, Aquí básicamente insta a que trabajes en un área lo más hermética posible, en donde puedas estar aislado y protegido de cualquier distracción (visuales y/o auditivas). Metete en una oficina, pon letrero de no molestar, Colócate audífonos aunque no estés escuchando nada (lo digo por experiencia, cuando la gente te ve con audífonos trabajando no suele interrumpirte, a menos que sea algo muy importante; pues eso implicaría tocarte el hombro para llamar tu atención. Y si lo que querían decirte era algo trivial; un meme, un chiste o algo así, a la primera que no les contestas, ya no insisten). La cuestión es que te desconectes hasta que lo más importante de tu bloque de tiempo, lo que el libro llama -lo único- este hecho.
  • Haz acopio de provisiones, ten a mano todos los útiles, materiales y agua que puedas necesitar. Un simple paseo a la copiadora, a buscar un lápiz a otra estancia o a la cafetera te saca de tu concentración; podrías toparte con alguien o con algo que tengas pendiente hacer y adiós a tu enfoque.
  • Desactiva las Minas, a ver si adivinan que es lo que el autor llama “minas” en esta analogía… jejeje. Pues sí, son las notificaciones, ya sean de tu celular a de tu computadora. Desactívalas todas! Tu tarea más importante necesita el 100% de tu atención, y;
  • Búscate apoyos, Comunícate con todos aquellos que tienen más probabilidades de interrumpirte, mientras estás haciendo lo único, e indícales a qué hora estarás disponible nuevamente. Al principio cuesta pero con el tiempo se acostumbrarán. Lo digo por experiencia.

 

4 – Los 3 Compromisos

En esta parte el autor te invita a que asumas 3 compromisos. Que más que ejercicios prácticos, son cambios de mentalidad Te los mencionaré:

  • Sigue el camino de la maestría, Esta es la regla famosa de las 10 mil horas. Dedicar todas esas horas a un hábito en concreto, termina superando al talento de cualquiera. Como me gusta pensar: “Hábito mata talento”. Y ¿qué hábito debes practicar? Pues esos que te llevarán a cumplir tus metas. Recuerdas los hábitos que dieron de resultado en la verdad No. 2 de entrada anterior?, del episodio No. 20. Bueno, esos! No hay excusa de que no hay claridad, ya vamos teniendo todas las piezas del rompecabezas para ser unos másteres en lo que queremos lograr.

Estoy pensando en hacer una hoja de ruta, que te de un orden recomendado de escuchar o leer mis entradas para que dé como resultado un plan accionable. Tal vez a fin de año haga una recopilación así de todo lo del año, pues tengo en lista más libros por leer que pienso complementarán mucho. Vamos a ver que se me ocurre.

  • Avance de E a P, Este compromiso habla sobre 2 métodos de conseguir algo. El Método Emprendedor y el Método con un Propósito. Por eso el compromiso se llama “avanzar de la E a la P”. pues el autor indica que el método emprendedor es como un ciclo vicioso en donde cuando estas trabajando para una meta en específico y tienes una decepción, te resignas y luego pasas a otra cosa. La verdad para serles sincera no considero que la palabra “emprendedor” sea sinónimo de un proceso en donde es muy común decepcionarse, resignarse y pivotar a otra cosa, pienso que eso sería generalizar cruelmente. Puede que el autor haya utilizado ese término porque las estadísticas de los emprendedores no son muy alentadoras en los primeros años, pero considero que no es la norma. No lo sé, es mi humilde opinión, la cuestión es que el autor indicó en esta parte que lo mejor es adoptar un método de hacer las cosas con un propósito en donde lo primero sea:
      • Concentrarse
      • Adoptar Modelos
      • Establecer Sistemas
      • Monitorear Resultados

La verdad en esta parte el autor invita a cambiar de mentalidad, a que no afrontes el proceso de conseguir algo con el método emprendedor que va pivotando de una cosa en otra. El invita a que te enfoques identifiques los hábitos que debas incluir en tu vida y vayas por ellos hasta tener resultados extraordinarios, hasta obtener tu maestría de 10 mil horas.

  • Asume el ciclo de la responsabilidad, este es el último compromiso que el autor recomienda y les digo por experiencia que no es fácil, menos en estos momentos un poco inciertos. El autor dice que; de lo que sea que te ocurra, debes asumir la responsabilidad, que no te hagas la víctima buscando escusas o culpables. Aquí para ejemplificar lo que dice te dejaré una imagen de un diagrama buenísimo que pone en el libro (la figura 32 del Libro).

Ok, con este tema de mentalidad y de asumir responsabilidades quisiera adicionar algo. El autor invita a cambiar de mentalidad, y no sé si fue porque estoy leyendo este libro con una pandemia en curso, pero no pude dejar de pensar mientras leía en la situación del coronavirus, y cómo eso ha impactado enormemente a todos. La verdad ninguno de nosotros es responsable de lo que pasó, y sigue pasando, todos fuimos arrastrados de una manera u otra en las consecuencias de decisiones de externos. El punto aquí y es lo que rescaté de esta sección es que independientemente de lo que pasó, nuestra actitud si es nuestra responsabilidad. Y es duro muchachos, lo sé, lo digo por experiencia yo sigo teniendo montañas rusas emocionales en donde mi actitud unos momentos está a tope de positiva y en otros no. Incluso, los que me siguen en Goodreads saben que he estado leyendo, y agregando a mis listas por leer, algunos libros sobre psicología, pues quiero entender un poco más muchas cosas. El cambio de mentalidad no es algo que se obtiene haciendo un ejercicio con una hoja de papel. Es todo un trabajo evolutivo. Mi recomendación directa siempre es que no minimicen lo que sienten, sobre algo ocurrido en sus vidas, y si sienten que en algún momento la situación los sobrepasa, pidan ayuda profesional, hacerlo implica más responsabilidad y valentía que solo ser positivos.

 

5 – Los 4 Ladrones

Y finalmente llegamos a la última recomendación práctica del libro para priorizar y es mantener a raya los 4 ladrones de productividad.

  • Ladrón No. 1 – La incapacidad para decir que no, No puedes contentar a todo el mundo. De hecho, si lo intentas, la persona a la que nunca contentarás es a ti mismo, decir que no siempre debería ser tu primera opción. Cualquier petición que recibas debe estar alineada con tu propósito y con tus metas, que son lo único que harás en determinado tiempo. Si no esta alineado con eso. Pues no le dediques tiempo. Cada vez que le dices que si a algo, le estas diciendo que no a otra cosa y esa otra cosa puede ser el trabajar en conseguir tus metas.
  • Ladrón No. 2 – Miedo al Caos, no eres un superhéroe, cuando trabajas en lo único de cada bloque de tiempo. El mundo no se detiene a esperar que tu termines. Todo continua; tu bandeja de entrada se seguirá llenando, tu celular seguirá recibiendo notificaciones, el tiempo aumentará la presión de que atiendas otras cosas. Lo importante es que sepas que no tienes por que tenerle miedo al caos que puede aumentar mientras haces trabajo de concentración. El caos, el desorden y las notificaciones aumentarán las atiendas de inmediato o no. Pues cada cosa que construyas en tu vida invitará al caos, acostúmbrate a ello, no seas bombero queriendo apagar fuegos a cada momento y concluye las acciones que estén alineadas a lo único.
  • Ladrón No. 3 – Hábitos poco saludables, creo que aquí no tengo que enfatizar mucho, pues es algo sabido por todos, que tener mala salud te roba tu productividad. Tu cuerpo y tu mente necesita cuidados, no tienes un cuerpo de repuesto. Si no te cuidas, las consecuencias te perseguirán el resto de tu vida. Debes dormir lo suficiente, debes alimentarte bien y debes mantenerte activo. Aquí me gustaría mencionar rápidamente algo real que me ha pasado. Como mencioné antes, mi meta de este 2021 era recuperar mi salud en todo el sentido de la palabra y eso implicó un cambio de alimentación, en donde he priorizado la ingesta de vegetales sobre la de carbohidratos. Bueno, yo generalmente me enfermaba de gripe unas 4 veces al año. Lo sé con exactitud pues llevo un registro financiero de mis gastos y cada vez que me enfermaba entre doctor, medicamentos e inyecciones me gastaba más o menos 70 dólares, era algo tan recurrente en mi vida que ya lo tenía en mi presupuesto anual. Además de eso, soy alérgica al polvo y muchos días las crisis de alergia me tumbaban por completo, en donde mis mejores amigas eran las Cetirizina y las Alegra (siempre cargaba de esas benditas pastillas en la cartera). Bueno señores, adivinen que; estamos a 1 de agosto de 2021 y mi ultima gripe fue en octubre de 2020 y mi última crisis de alergia en marzo de 2021, cuando generalmente tenía por lo menos una de esas crisis de alergia a la semana. Milagro? No señores, comer vegetales fortalece tu sistema inmunológico, es un hecho! Se los digo por experiencia, No lo digo como médico, saben que yo de eso no sé nada, pueden investigar por su cuenta. Yo se los digo como alguien que ha incluido hábitos saludables a su vida. En conclusión; no tengo que explicarles que cuando estas enfermo no avanzas a la misma velocidad que cuando estas sano, verdad? Si no cambias por conciencia propia, hazlo por tu productividad o por economía, pues ciertamente he tenido alguito de ahorro en ya no comprar medicamentos.
  • Ladrón No. 4 – Un entorno poco propicio para lograr tus metas, este es el último ladrón y cuando el autor habla de entorno, no se refiere solo al entorno físico. También menciona a las personas que te rodean. Aleja de tu vida a la gente tóxica, no importa si son familiares tuyos. Si sigues rodeado de gente quejosa, dramáticas y con problemas; parte de eso te lo traspasarán a ti. Por muy fuerte que creas que eres no puedes evitar el 100% de las influencias negativas. Rodéate de gente que quiera crecer, de alguna manera esa hambre de crecer te afectará también y te impulsará hacia arriba.

 

Y bueno chicos, una vez más termino esta entrada. Yo los invito a ponerse la camiseta del proyecto más grande que puedes gestionar, que es tu vida; y priorizar en lo que realmente importa. Recuerda que no hacer nada es también una decisión. No decidas quedarte donde estas, siempre se puede mejorar y siempre habrá posibilidades de seguir avanzando.

No alargo más la entrada, ya saben dónde contactarme. Muchas gracias por permitirme compartir mis aprendizajes y poder trabajar alineada a mi propósito. Nos vemos el 1 del próximo mes.

Compartir esta entrada